domingo, 21 de mayo de 2017

2012) MI TOP TEN DE FINAL FANTASY, SANTIAGO QUELAL PASQUEL


Cuando Square se iba a la mierda en 1987, de la mente genial de Hironobu Sakaguchi salió su última fantasía. el juego que sería para muchos el mejor juego de rol de todos los tiempos: Final Fantasy. Este juego tiene mi edad. Casi treinta años. He COMPLETADO más de diez juegos DE LA SAGA PRINCIPAL, A EXCEPCIÓN DE FINAL FANTASY 10, QUE ES UN AMOR FRUSTRADO Y UN CUENTO APARTE; algunos como el 3,6.7 y 8 los he jugado más de una vez, porque son mis preferidos. Acá está mi lista muy subjetiva, generada por el gustímetro:

1. FINAL FANTASY 8, 1999

Este juego es pura nostalgia y muy especial para mí. Fue el primero que completé, tenía trece años y cursaba el segundo curso del cole. Tenía el Nintendo 64 y jugaba con mucha adicción a Star Fox, pero cuando Final Fantasy 8 apareció en mi vida fue un flechazo a primera vista. Nunca había visto gráficos tan detallados en un juego, ni una historia tan compleja. También me identifiqué mucho con Squall Leonhart, para mí, el mejor personaje de Final Fantasy. Otro punto a favor es que aparece aquí la bestia de las bestias, el legendario Omega. Un jefe opcional clásico en Final Fantasy.

2. FINAL FANTASY 7. 1997

Es muy probable que sea el mejor Final Fantasy de todos los tiempos, pero mi nostalgia puede más y es por eso que lo pongo en segundo lugar. Lo que sí estoy seguro es que el modo de batalla es el más adictivo de todos, incluso más que Final Fantasy 5. que le hace también competencia en su modo de acumular magias, elementos, anillos, armaduras; pero Final Fantasy 7 le gana por un pelito. Me parece que el mejor modo de disfrutarlo es jugar de 80 a 100 horas de juego, completando todas las aventuras adicionales, conseguir todos los límites y tener el chocobo dorado. Tener las mejores armaduras, armas y matar a Arma Esmeralda y Arma Rubí sin la ayuda de las ranuras de Caith Sith, ni ningún tipo de trampa, sino como los héroes. Sin tareas adicionales, creo que Final Fantasy 7 no sería lo que es. Un clásico que nunca morirá.

3. FINAL FANTASY 6. 1994

Es el primero que jugué, tenía 12 años y estaba en primer curso de cole; sin embargo fue después de diez años que lo acabé. Es el mejor, desde mi punto de vista, que, en conjunto, tiene los mejores personajes. Es que todos son inolvidables. Terra Branford, el mejor personaje femenino de todos los tiempos, mitad humana, mitad esper. Celes Chere, la mejor voz. Locke Cole, el mejor cazador de tesoros. Edgar Fígaro, el mejor mujeriego. Sabin Fígaro, el mejor luchador. Cyan Garamonde, el mejor caballero. Setzer Gabbiani, el mejor bohemio. Shadow, el mejor ninja. Relm Arrowny, la mejor dibujante. Strago Magus, el mejor mago azul. Gau, el mejor salvaje. Mog, el mejor moguri. Umaru, el mejor Yeti y cómo olvidar a Gogo, el mejor artísta de la mímica. En Final Fantasy 7 existe una materia capaz de imitar igual que Gogo, la materia Gesticular, un reminiscencia quizá de Gogo. Además el villano Kefka, y su risa y su personalidad malvada hacen de este Final Fantasy una obra maestra, la última de los 16 bits para Super Nintendo.

4. FINAL FANTASY 3. 1990

Estamos en presencia frente al trabajo de un joven Hironobu Sakaguchi en la perfección de los clásicos para Nintendo de 8 bits. Todavía era la típica trama de los guerreros de la luz frente al desequilibrio entre la luz oscuridad y los cuatro guerreros salvadores de la humanidad. Es para mí una nostalgia tardía, porque lo jugué ya cuando tenía veintinco años, pero una joya entre las joyas y se merece este puesto. La música es maravillosa, gracias a Nobuo Oematsu, quien será el encargado de la música hasta Final Fantasy 10, es repetitiva, pero adictiva, y me encantaría que fuera la música de fondo para morir, es  S I M P L E M E N T E  G R A N  D E. Los gráficos para la época son de lo mejor, pero sobre todo el modo de batalla y la libertad para ser mago, ninja, guerrero cuando a uno más se le dé la gana. Aquí el personaje Cid, el del barco volador, es uno de los personajes más carismáticos en esta entrega y volar con la música de Final Fantasy 3, no tiene precio. Una joya no muy valorada hoy en día.

5. FINAL FANTASY 5, 1992

Uno de los elementos más atractivos es el modo de trasladarse por el mundo, muy variado, como el barco volador, a chocobo, o en dragón de viento, también el casi perfecto modo de batalla y acumulación de punto de experiencia y puntos de habilidades; sin embargo lo que hace GRANDE a Final Fantasy 5 es el modo de TRABAJOS, mejorados de lo que fue Final Fantasy 3. Eran 22 originalmente, en Game Boy Advance son 26, y en últimas versiones llegan a 32. Todos comienzan con aprendiz, pero mientras va encontrando cristales esas habilidades aparecen gradualmente, conforme se avanza en la historia lineal y en algunos secretos del juego. Los personajes no tienen la fuerza de otras entregas, aunque sí los jefes opcionales como el legendario Omega y un Dragón Dificilísimo cercano a Omega que ahora no quiero acordarme, por el dolor de cabeza de la dificultad de ese bicho. El jefe final Exdeath, también es muy difícil si no se sabe las estrategias, mucho más que Zeromus de Final Fantasy 4, que en comparación de Exdeath es un niño.

6. FINAL FANTASY 12,  2007

Es un buen juego. Los mejores gráficos para la Play Station 2. Este juego lo acabé en el transcurso de dos años, por diversas razones. Debido a que se podía grabar el juego en cualquier momento, lo grabé en un mal momento con mis personajes casi muertos y tuve muchas dificultades para seguir. Otra, porque pasaba por un momento horrible en mi vida, que ni ganas de jugar me daba, además de que no tenía mucho tiempo libre. Es impresionante cuánta tela almacenaba un solo disco en la Play Station 2, porque el juego parecía nunca acabarse, ya había jugado noventa horas de juego y no daba indicios de finalizar. Este es un juegazo debido a las múltiples tareas adicionales, creo que con todas esas tareas el juego ronda por las 150 horas a 200 horas de juego fácilmente. Una larga, larga aventura. Una mención especial para Balthier, a mi juicio, el mejor personaje de Final Fantasy XII.

7. FINAL FANTASY 4, 1991

Algunos imberbes dicen que es un juego difícil, pero a mí no se me hizo nada complicado. El juego es muy simpático, pero no de los mejores, a mi gusto. Por qué. El personaje nunca me gustó. El tal Cecil. El de la flota de Baronia. Tampoco su amiguete el Draconario Kain. Tienen una onda muy militar, no gamberra, ni libre, como me gustan a mí los personajes de Final Fantasy. Gusto muy subjetivo. Fuera de eso, el juego es muy guapo. Aparece el chocobo negro y por primera vez vuelas en este adorable animal. Además te vas a La Luna y matas bichos rarísimos y mazmorras más raras todavía. Es de esperarse que el jefe final, sea un extraterrestre rarísimo de alguna lejana galaxia, pero es pan comido este Zeromus, en comparación de otros jefes finales.

8. FINAL FANTASY 1, 1987

Era el tiempo cuando Dragon Quest lo copaba todo: revistas, concursos, premios, posters. Era el juego de rol por excelencia hasta que apareció la bestia de Final Fantasy para destronar al rey y colocarse junto a los más grandes juegos de la historia. Claro que el primer Final Fantasy logró un éxito moderado, pero hizo escuela. Creo originalidad. Creo esa oscuridad y luminosidad inexplicables creando una obra única. El primero es un juego adictivo, porque subes de nivel, además de ser un Mago Rojo, Blanco, Negro, Guerrero, Ladrón y Monje. Los trabajos básicos de la saga, que irán evolucionando en otras entregas. Mención especial para Caos, reencarnación después de 2000 años de Garland, ese oscuro jefe final del juego.

9. FINAL FANTASY 9, 2000

Por qué lo pongo tan bajo, si para muchos, muchísimos este es el mejor Final Fantasy de todos los tiempos. Bueno, se respeta, pero para mí están fumados. Los que afirman esto, dicen que es una vuelta de tuerca a los clásicos Final Fantasy, me imagino que a los que se desenvuelven más en la onda de la edad media y en ese rollo; sin embargo eran más oscuros. Final Fantasy es demasiado original para mi gusto, es como si fuera otro juego, muy infantil. Insisto, es el único juego de Final Fantasy que he jugado que no tiene ese fuego esencial que forjó y que caracteriza a la saga. Esa oscuridad perversa endemoniada adictiva desconocida de la que carece Final Fantasy IX.
Además es muy largo, y rogaba que de una puta vez se acabe.

10. FINAL FANTASY 2, 1988

Qué recuerdos. Este juego lo recuerdo por lo mal que lo pasé jugándolo, sin embargo por ser Final Fantasy me lo comí entero en el transcurso de seis meses. Es el peor de lejos de Final Fantasy 1 al 10, por la fatigosa forma de subir niveles, ataque, defensa. Además que toca saber el truco de no usar doble espada, sino que siempre usar cualquier escudo idiota, para subir en estado del personaje. También hay que enterarse de coger una puta espada que está muy muy escondida en algún pueblo, que si más no recuerdo sólo sirve para enfrentarse al jefe final del juego y hacerle cosquillas. Así te ahorras horas y horas de sufrimiento tratando de subir estadísticas, botando espadas, recogiendo escudos, botando espadas, recogiendo escudos, así hasta el cansancio, además de tener las magias Fulgor, Artema y Sanctus para la mazmorra final. Los gráficos no ayudan demasiado.
Recomendado sólo para fans de Final Fantasy. 









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